control
La palabra mágica para evitar consecuencias no deseadas, bien usada supone una gran herramienta para la consecución de nuestro gran objetivo que es la felicidad.
No obstante, y como todo llevado al extremo, el control cuando los domina no nos deja avanzar ni lograr el objetivo. Sin embargo, en el sentido positivo de la palabra, llegar a controlar situaciones negativas supone un gran avance personal y profesional.
¿Qué se puede controlar?
Los impulsos, tanto físicos de tomar una acción, como verbales de palabras que nos hacen prisioneros de mensajes que transmitimos a nuestro entorno. Las decisiones tomadas en un intervalo de tiempo tan corto, que no ha sido posible reflexionar sobre las consecuencias de las mismas. Los círculos viciosos de discusiones y reproches que son un absurdo.
¿cómo?
Estoy descubriéndolo....